"La rebelión es mirar una rosa hasta pulverizarse los ojos" Alejandra Pizarnik-en esta vida

"Solo veo rosas" Alejandra Pizarnik-más allá de esta vida-

Solo soy pura rebelión, vino a decir... aunque no sola estás

Vos no está sola. Y esta rebelión se hará. Y no desde la soledad. No desde cuatro gatos somos y por eso nos pisotean. ¡Una ola de Rebelión vendrá que tambaleará los cimientos podridos de estas sociedades!



lunes, 10 de septiembre de 2007

Alejandra Pizarnik, ella que, como digo en "Solo veo rosas", parece ser en un mismo rostro mil, o "legión" q se dice del amigo Príncipe de las

Tinieblas (Y al escribir esto, allí en "Solo veo rosas", lo de parecer ser legión, que se dice del otro, me tiró los folios, o el libro del atril al suelo, su malísimo fantasma) Príncipe de las tinieblas... ¿Y cuál más tiniebla?, dios. Hasta que el amigo 666 llegase a ser tan hijoputa que el 777 o setenta veces siete... ni tiempo tendría en el de toda la creación. Pues, efectivamente, "¡¿Quién más que dios?!", preguntó la exaltada soberbia. Pues aquí Alejandra Pizarnik y las mil que fuese, para mí las todas, dándose un aire, ¡o la otra dándose a ella, joder!, ya soltaré aquí la fotito, a la Silvia Plath tan bestia cual ella que de cincuenta seconalazos o de meter la cabeza en el horno. Pobre Silvia, ninguneada esa vez por la nadería de su maridito gran poetito entre o para la sociedá de los machitos hembras taradas incluiditas.
Pobre Silvia, pobre Alejandra, pobre de mí, sociedades macho que nos tocase vivir, pobre y verdadera alma de la mujer tan sin expresión nunca, tan todo tan macho, tan pobre, tan sucio. Valga esta misma foto de Silvia que acabo de agenciarme, no es a la que me refería, pero qué idéntica expresión. Qué desencanto, a más aparenten posar tan interesaditas por el objetivo que las mira.
Silvia Alejandra. Para los amantes de nombres compuestos, he aquí otro de lo más eufónico como el de Carmen Alejandra. Siento ponerte, amorcito, miniña miniña miniña, en segundo lugar, pero lo requiere el oído. Haberte elegido para rebautizar tu Flora, un Carmen, un Silvia. Hasta Flora Alejandra es más eufónico. La alejada de los hombres, si fue humilde, que hasta se rebautizó con nombre tan discretito que siempre aspira a segundo lugar.

Grupo poético de Sombra & Sombra. Dentro de mí con ella que es yo