Del dormitorio, koimetérion, como veían los griegos, ven, a los cementerios, al Talmud, betajain, la casa de los vivos que así lo veían ven tus ances-

tros, tu pueblo. Gracias Alejandra por mostrarme mediante la cultura de tu raza el exacto lugar donde te encuentras: VIDA, LA CASA DE LOS VIVOS. Esa llamita, hanuká, me donas, además de hacerme partícipe de las raíces conclusión final de ese gran libro de tu pueblo, TAN COMO MIS RAÍCES, MI CREENCIA: Hubiese sido mejor que el hombre no hubiera sido creado.

Apuesto por eso y además puntualmente: el hombre, gº masculino, aunque también tanta hembra tarada con él de la cual habremos de decir gº femenino.

No puedo creer en ninguna religión, ni siquera judía, la de tu raza; pero sí puedo creer en el Libro, en todo lo grandioso lo magnífico que contener pueda, en todas esas frases talladas de la misma vida, esas palabras preciosas precisas como tu-ya quisiera que-mi Lengua.

Pero hay más, tanto habrá, tanto en mis biblias anotado, tanto en tu pueblo tan como tú, tanto en su cultura, como aquel considerar las Palabras Palacios cual tu Palais, como este análisis, conclusión, respecto de la génesis de la Tora que hace el Talmud: Del odio de los hombres entre sí nació la Tora. También todo un análisis literario de la mayoría de las palabras que se vierten, yo muy incluida, tú tan poco por no decir nada, exceptuado aquel poema grandioso en la sala de psicopatología, pero que la maldición te salio tan light como aquella queja ....nace un estado de terror que niega el orden de los humanos, o lo que escribiste en tu año mirábilis, 1962 París: ...en vez de salir a la calle con un cuchillo y agredir a todo mundo; tan poco, ¡siempre que no ocurra lo que en un sueño mío allá por la época en que te muriesen, se decía: Diario escuela o espuela de ponte dura hecho desaparecer!, lo que hacen tus textos olvidados en Princeton, allí también en su koimetérion, dormitorio, o los muchos que los que te heredasen intelectualmente y de hecho hiciesen desaparecer.

Y pil-pel, término que quiere decir pimiento, por lo visto, palabra con la que bautizaron su técnica los talmudistas eslavos de discutirlo todo hasta el absurdo. ¡Cuán te me apareces aquí en tus prosas finales QUE TODOS SE PROCURARON DE ARRUINAR ARRUINÁNDOTE CON ELLO LA VIDA, CUÁN TU HUMOR MAGNÍFICO, TU MAGNÍFICA CREACIÓN RECREACIÓN DEL LENGUAJE, NO SEMEN VIEJO, SINO OVARIOS ÓVULOS TAN VIVOS! PIL-PEL el que hubiese practicado vos bastante mejor que el Kafka al que tanto admirases...
Mi Tóra, leído con el acento en esa "o", mi tora, tauro, Pizarnik que quiere ser Kolikowsky. En la Ciela debe estar muy unida a su rusa abuelita paterna que no conoció en los Tierros (tierros son, aunque tú escribieras lo de la luz por tus huesos al pronunciarla en femenino) pues los nazis la exterminaron.